Trabaja, convive, va al supermercado, cambia pañales, calma a los niños, cocina, lava los platos (ja), maneja... Duerme, come, c...
En fin, después de 5 intensos días de golf, decidimos con Chirs darle un lugar al turismo y nos fuimos al mediodía a almorzar a Gallargues, una pequeña villa de la comarca, cerca de Uchaude, donde hay un restaurante altamente recomendable: La Orquídea.
Entrada, plato principal y copa de vino por 18 euros (IVA incluido). ¡Qué bien comimos! De entrada un Terrin de verduras y jamón crudo, una especie de arrollado de zucchini, jamón crudo, ají y otras verduras. De segundo plato, agujas de pato con verduras y un cacharro lleno de puré de papas. Exquisito.
De ahí fuimos a recorrer la Camargue, que es algo así como la Comarca. Llegamos a una puerta fortificada de la época de los señores feudales: uno de los primeros antecedentes del actual peaje. El que quería pasar, tenía que ponerse, igualito que ahora para nosotros.
Llegamos a una ville de nombre incierto: Aigues Mortes. Toda fortificada, como para tirarle un misil hoy y hacerla desaparecer. Volvimos a casa, piletazo y a jugar al golf en Nimes Compagne. Bien tarde.
Turística: la ciudad es visitada por miles de personas cada día.
Turística: la ciudad es visitada por miles de personas cada día.Bogey al uno (tres putts), birdie al dos, birdie al tres, par al cuatro. No lo podía creer. El quinto fue el 9, al que le robé un par. Par al 10, par al 11. Saltamos al 13: bogey. Par al 14, para terminar 9 hoyos en par de campo. Y nos fuimos a comer un asado a casa.
Así terminó la gira francesa de este Presidente golfeta. Fusilado y con la espalda hecha un fleco. Pero feliz. Muy feliz.
Nos vemos pronto, golfetas.




1 comentario:
Excelente cronica gordo! Muy buenas fotos.
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