9 de noviembre de 2009

El optimista del golf

El palo había estado bien guardado en la bolsa. Resplandeciente y recién llegado de Miami, no pudo ser estrenado en la semana previa a la SSI debido a una inoportuna tormenta.

Al regreso de Mar del Plata tuvo que esperar otros quince días por el mal tiempo. Hoy era el día de su lucimiento, en Golfer's.

Las cosas venían más o menos bien. Digamos, una de cal y una de arena. Hasta que en el hoyo 10 la salida con el driver, un poco cortada de más, fue a parar a los árboles de la derecha, antes del fuera de límites, para depositarse muy cerca (demasiado) de un añoso tronco.

El golfeta que suele aparecer en la revista Fortune se paró, hierro 4 en mano, como para darle a la pelota con el tronco del árbol a su izquierda, justo hacia donde apunta cualquier follow through. Los compañeros de línea pensaron: "Sabrá lo que hace". "Ojo la vara". Pero no dijeron absolutamente nada.

Y tal como preveían, después de impactar la pelota con un socket pobretón que apenas logró avanzar la bola unas yardas hacia el fairway, la vara efectivamente golpeó el árbol. No llegó a quebrarse, como se ve en la foto, pero el hierro quedó inutilizado.



Hasta aquí, un accidente que muchos hemos vivido y del que hemos aprendido. La sorpresa fue cuando después de salir en el hoyo 14 -esta vez hacia la derecha- el golfeta que suele aparecer en la revista Fortune intentó pegarle a la bola... ¡con el hierro 4! sin percatarse la falta de alineación evidente en la vara-

Hay quien remarcó cierto paralelismo entre este hincha fanático del Ciclón y Martín Palermo. Es capaz de comerse tiros imposibles (como errar tres penales en un mismo partido) y de repente asombrarnos con resultados fantásticos desde las posiciones más incómodas: "Es como que las ramas me están tocando el culo", graficó en el hoyo 12, después que su pelota se pasó del green y fue a parar casi dentro de un arbusto, mientras tomaba el stance desde esa posición.

La cuestión es que el tipo la rema y la rema, como el 9 de Boca. Por ese motivo, hoy se ganó el apodo: El optimista del golf.

3 comentarios:

El Enzo dijo...

Poncini, ¿para cuándo un fouball con El Beto Acosta?

El optimista dijo...

Como Palermo... pero antes de que le metiera un gol a nadie! Gracias por la crónica dedicada, me hizo reir.

AG12 dijo...

Gordo, te salteaste lo mas jugoso de la historia...

Pepe saca a buena (historia relatada) y despues decide jugar un hierro 4 al green, tira un asquito, mete el palo en la bolsa y dice "Che, que poronga tire, no se me habra doblado el hierro?"!!! Ahi nos dimos cuenta de todo.