Y valió la pena… Al llegar al tee del uno (tarde por un piquete en la puerta del country), un par de promotoras nos tomaron los datos y nos entregaron una bolsita con regalos a cada uno. (Tubo de bolas, guante, gorra con marker en la visera y camperita para lluvia de mangas cortas. Al margen de una cajita con unos snacks que vinieron muy bien para los casi 50 minutos de suspensión por tormenta)Armamos un “Lobo” y salimos a la cancha en este orden: Depetris, Penano, Pablo (el cuñado) –y que merece un párrafo aparte- y JavierZ. (Este último dio la nota de color, pronunciando palabras en Guaraní y repetidas veces untándose repelente de mosquitos… Si te vieran en Tacuarembó…)
Este es el párrafo que merece “el cuñado”. Un verdadero campeón. Arrancó flojo de cadena y se fue encausando de a poco. Pero lo destacable no es su golf (sorry man) sino su onda. Muy buen humor a pesar de haber fulminado el embrague en el camino. Y un par de anécdotas, que ya casi no recuerdo, contadas más tarde mientras degustábamos un champagne (de garrón también obviamente) en la entrega de premios. Pero en definitiva hablamos de un Golfeta de nivel superior, que tiene su propio circuito y que, por citar sólo un ejemplo, tiene 16 personas en lista de espera para ser admitidas en el próximo viaje a Mar del Plata.Volviendo a la cancha, en lo personal me pasaron dos cosas. Por un lado, juegué un vueltón de 78 (gross) que resultó en un 69 neto. Por el otro, en el “Wolf” no pude con las habilidades de seleccionador de Castro Martínez, quién, a pesar de jugar un golf espantoso (tras más de 1 mes sin jugar), terminaría el día alzándose con el premio pactado: La pelota con la que cada uno había jugado (y atención que parece establecerse como el premio default de ahora en más)
No puedo quejarme: el 69 neto significó el primer lugar en la categoría 0 a 9 y al mismo tiempo el mejor neto de todas las categorías. En consecuencia: Una copa importante, otra camperita, un bolso de viaje para llevar los palos en avión y la clasificación a la “Gran Final” de la LAN Golf Cup a jugarse en noviembre en Martindale.

Nobleza obliga, Gracias Cuñado, Gracias Penano, Gracias Culasso (por no ir) y Gracias Piero!

3 comentarios:
Che, si es tan importante, ¿por qué los de Fourwinds no premian al mejor gross?
Elemental, porque premiar al mejor gross dejaría afuera a cualquier alto handicap, y como acción de marketing no parece muy astuto, no?
Muy bien DP3, un digno representante de Golfetas.
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