Draft Day

Llegó el día-D. Una bisagra. Un quiebre. Un día que va a quedar en la historia.

Porque ya nada va a ser igual. Ni siquiera en octubre próximo, cuando se repita la hermosa experiencia vivida en el primer Silver Sea Invitational. A partir de hoy, habrá dos veredas, la del bien y la del mal. La de los victoriosos y la de los perdedores. Los despiadados y los pecho-frío. Y si llegara a pasar que uno de los dos equipos estableciera cierto dominio sobre el otro, cada vez que se aproxime el mes de diciembre, de un lado será todo ruido y alegría, y del otro sólo habrá cabezas bajas, broncas y hasta planteos internos y reproches sobre las decisiones polémicas tomadas en la cancha.

Pero todo esto es futurología lejana, mientras que lo que realmente nos tiene hoy con los pelos de punta es la sucesión de votos que se darán hoy, desde las 18 hs en adelante, y que no tiene hora de finalización.

Se sabe, la orden de mérito actualizada al día de hoy, que no es otra cosa que el handicap otorgado por la AAG, ha determinado a los dos capitanes. Dos responsables absolutos en este día único. Cimadevilla-Depetris. Depetris-Cimadevilla. La elección será acotada ya que, uno tras otro, los capitanes deberán escoger a uno de los dos jugadores siguientes en esa misma orden de mérito.

Epígrafe: Cimadevilla y Depetris. En 2006 compartiendo una vuelta en Hurlingham GC cuando nada los separaba.

Y la mochila cayó por sorteo en los hombros de Depetris. El Choice es drástico. ¿Febré o Bolado? Acompañará a la Presidencia como todo el mundo supone? ¿O en un voto no positivo para el oficialismo se decidirá por el aguerrido Dr. Tripenetrante quien no llegó a Capitán por tan solo un golpe? Y luego la presión para el Poio Cimadevilla: ¿Castro Martínez y su estilo conservador y sus putters tan estudiados, o Culasso con sus tiros más arriesgados, o en definitiva más “timabaletero” como el propio capitán ahora patagónico.

Nada se sabe pero mucho se especula. Todos están a la espera de la última lista de confirmados, que en definitiva habilitará el inicio de la votación.

Pase lo que pase, la tranquilidad que todos tenemos es que, en una u otra vereda, el Tour Golfeta camina por la calle de la Caballerosidad y en eso nunca ha errado el fairway.

A todos: “Adelante y suerte”.